Santo Domingo.- En medio de un ambiente cargado de dolor, confusión y preguntas sin respuestas, son velados este martes en la funeraria Gresefu de la avenida Sabana Larga, en Santo Domingo Este, los restos del exmilitar Fabio Montero Berihuete, quien la madrugada del lunes protagonizó una tragedia que ha estremecido al país. Montero, quien perteneció a la Armada Dominicana, le quitó la vida a su esposa Ofrani Canario, a su hijo Santos Canario y a su nuera, antes de suicidarse con el arma de fuego que portaba.
Los cuatro ataúdes fueron colocados uno al lado del otro en la capilla dorada de la funeraria, donde familiares y amigos acuden desconsolados a dar el último adiós. Entre lágrimas, oraciones y gritos desgarradores, se vive una escena marcada por la incredulidad. “Esto no tiene explicación… él era un hombre tranquilo, jamás pensamos que haría algo así”, comentó entre sollozos una allegada de la familia. En el lugar también estuvo presente uno de los hijos del exmilitar, quien sobrevivió al ataque y asistió visiblemente afectado al velatorio de sus padres y su hermano.
Te puede interesar: Exmilitares colombianos presos por muerte de Moïse denuncian torturas
El hecho ocurrió en la residencia número 31 de la calle Juan Bautista, en el sector Nueva Jerusalén, próximo a la Armada Dominicana, donde Fabio Montero irrumpió en la madrugada del lunes armado y abrió fuego contra su familia. Según los informes preliminares, no se habían reportado conflictos familiares o señales de violencia previa, lo que ha dejado a la comunidad sumida en la confusión. “No había problema matrimonial ni familiar. Solo Dios sabe lo que pasó. Ahora nos toca orar y pedirle fuerza a Dios”, expresó otro familiar.
Las autoridades aún no han ofrecido mayores detalles sobre las posibles motivaciones del exmilitar, aunque se espera que en los próximos días se revelen avances de la investigación. Por el momento, lo que predomina es el dolor de una familia fracturada por una tragedia que nadie vio venir. El comportamiento aparentemente sereno de Montero ha hecho aún más difícil de comprender lo sucedido.
Está previsto que los cuerpos de Fabio Montero, su esposa y su hijo sean sepultados hoy a las 3:30 de la tarde en el cementerio Cristo Salvador, ubicado en Santo Domingo Este. Por su parte, el cuerpo de la nuera fue trasladado a la provincia de El Seibo, de donde era oriunda. En tanto, la comunidad del sector Nueva Jerusalén y todo el entorno familiar permanecen consternados, tratando de asimilar una tragedia que enluta y deja cicatrices profundas.