París.- La Liga Francesa de Fútbol ha sancionado con nueve meses de suspensión al entrenador del Olympique de Lyon, Paulo Fonseca, por increpar de manera agresiva al árbitro Benoît Millot durante el partido contra Brest el pasado domingo 23 de febrero.
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La sanción, que estará vigente hasta el 15 de septiembre, impide a Fonseca acceder al área técnica, al vestuario y comunicarse con los jugadores durante los encuentros nacionales. Sin embargo, podrá dirigir en competiciones internacionales, lo que le permite estar presente en el partido de la Liga Europa contra el FCSB este jueves.
El incidente ocurrió en los minutos finales del encuentro cuando Fonseca protestó airadamente por un posible penal a favor de Brest. Tras ser amonestado, el entrenador portugués se acercó agresivamente al árbitro, siendo finalmente apartado por sus propios jugadores.
Apoyo del club y posible apelación
El Olympique de Lyon ha manifestado su desacuerdo con la sanción, argumentando que se trata de una reacción emocional sin intención de agresión física. El club ha señalado que está evaluando presentar una apelación, destacando la creciente controversia en torno al arbitraje en el fútbol francés.
El propietario del club, John Textor, expresó su respaldo a Fonseca a través de redes sociales: “Hoy estoy contigo, y siempre lo estaré. Cometiste un error, pero el castigo es demasiado severo. Eres el hombre adecuado para el OL y perseveraremos”.
Contexto de la controversia arbitral en Francia
La sanción a Fonseca se produce en un momento en el que el arbitraje en la liga francesa está siendo objeto de críticas. Recientemente, el presidente del Olympique de Marsella, Pablo Longoria, fue suspendido por 15 partidos tras acusar a los árbitros de “verdadera corrupción”.
El Olympique de Lyon continuará evaluando sus próximos pasos respecto a la sanción, mientras el equipo se prepara para sus próximos compromisos tanto en la liga nacional como en competiciones europeas.
