Una ciudadana estadounidense ha buscado protección en la Embajada de Estados Unidos en la República Dominicana, alegando persecución y presión policial después de inaugurar un establecimiento de venta de bebidas alcohólicas en la provincia de Dajabón.
Altagracia Domínguez Reyes, de ascendencia dominicana, expresó que ella y su hija Julie Martínez, la administradora del local, se sienten acosadas y amenazadas por los oficiales liderados por el coronel José Roberto Mejía, comandante de la Policía Nacional en la localidad fronteriza.
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«Hace 8 días tengo una persecución policial en la que me siento acosada y amenazada. Yo siento que a mi hija me la quieren hostigar en este pueblo, cuando simplemente estamos llevando a cabo nuestro trabajo», declaró Domínguez Reyes ante las cámaras de un medio televisivo.
La empresaria subrayó que posee todos los permisos necesarios para operar el negocio «Chamisco Drink» y no comprende las acciones de los miembros de la policía en Dajabón.
«Cada vez que abro el local, la policía llega y lo cierra… Aquí no hay prostitución; se trabaja por las reglas y se cierra en el horario correcto», afirmó Domínguez Reyes.
