Redacción De Último Minuto, Texas.– La Fiscalía del condado de El Paso anunció este martes que no buscará la pena de muerte para Patrick Crusius, autor del tiroteo masivo ocurrido en un Walmart de Texas en 2019, que dejó un saldo de 23 personas fallecidas y al menos 22 heridas. La decisión representa un giro significativo en uno de los casos más impactantes de violencia con armas en Estados Unidos, dirigido específicamente contra la comunidad latina.
El fiscal de distrito James Montoya comunicó oficialmente a los familiares de las víctimas que no solicitarán la pena capital. En su lugar, el acusado —quien ya se declaró culpable de 90 cargos federales de asesinato y crímenes de odio— permanecerá condenado a 90 cadenas perpetuas consecutivas, sentencia que recibió en 2023 en una corte federal.
Crusius, de 25 años, confesó haber sido el autor del ataque y admitió que sus motivaciones fueron de carácter racista. Tras su arresto, reconoció haber publicado un manifiesto en internet con mensajes de odio contra inmigrantes y de supremacía blanca, donde dejaba claro que su objetivo era atacar a personas de origen mexicano. El tiroteo ocurrió el 3 de agosto de 2019 en una tienda Walmart frecuentada por ciudadanos mexicanos en la ciudad fronteriza de El Paso.
Durante el juicio, tanto la defensa como la fiscalía revelaron que a Crusius se le diagnosticó un trastorno esquizoafectivo, una enfermedad mental caracterizada por episodios de delirio y alucinaciones. Esta condición también habría influido en que los fiscales federales, durante la administración de Joe Biden, decidieran no seguir adelante con la solicitud de pena de muerte, aunque no ofrecieron explicaciones públicas al respecto.
Se prevé que el Tribunal de El Paso convoque en abril una audiencia en la que Crusius reafirme su culpabilidad ante la justicia estatal y se dicte formalmente su sentencia. Actualmente, cumple su condena en una prisión de máxima seguridad en el estado de Colora