En su octavo All-Star Game, Stephen Curry logró por fin ser galardonado con el MVP del partido de las estrellas.
El base de los Warriors se llevó el premio tras firmar una absoluta exhibición de lanzamiento exterior que le hizo terminar con 50 puntos, batir varios récords, y, en definitiva, asegurarse de que no había manera alguna de que no era coronado como el mejor del encuentro.
Steph logró anotar 16 triples en 27 intentos (59,3%), varios de ellos absurdamente lejanos.
Incluyendo varios tiros desde unos 10 metros en los que, sabedor de que el balón iba dentro, se giró para volver a defender antes de ver el lanzamiento entrar.
Con dicha marca, Curry pulverizó el récord de triples en un partido de las estrellas.
Que estaba en posesión de Paul George gracias a los 9 que convirtió en 2016.
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De hecho, el de Golden State estuvo cerca de alcanzar dicha marca al descanso, pues anotó 8 tiros exteriores en cada parte, lo que le dio también el récord de triples anotados en una mitad del All-Star Game.
Stephen Curry
«Este trofeo tiene un valor muy especial» dijo tras recibir el premio, que desde hace dos años homenajea a Kobe Bryant.
«Significa mucho honrar a Kobe, Gigi y a todos los que perdimos hace dos años. Estoy muy agradecido y realmente lo aprecio».
Durante el encuentro, Curry se convirtió también en el jugador que más triples ha anotado en total en el All-Star Game, alcanzando los 47 en sus 8 partidos.
Steph superó esta madrugada a James Harden, que se quedó en 39 tras no poder disputar el choque.
Quien lo superó LeBron, que alcanzó los 40 y de hecho ostentó el récord junto a Harden durante unos minutos hasta que Curry les batió a ambos.
Además, según datos de ESPN, se ha convertido en el tercer jugador más veterano en ser nombrado MVP del partido de las estrellas.
A sus 33 años y 343, solo lo superó Michael Jordan, que ganó el premio con 34 años.
Así como Shaquille O’Neal quien lo recibió a los 36.
Fuente: NBAmaniacs
