Por: Estarlyn Carela
Samaná. – La playa de Carenero, ubicada en el municipio de Santa Bárbara de Samaná, enfrenta una crítica situación ambiental que amenaza el ecosistema marino y la economía local. A pesar de las reiteradas denuncias realizadas por diversos medios de comunicación, la contaminación en este espacio natural continúa en aumento sin que, hasta el momento, las autoridades adopten medidas eficaces para detenerla.
El comunicador Estarlyn Carela documentó en video un preocupante acto de contaminación en el área, donde se observa un bote y varias personas arrojando al mar desechos como plásticos, botellas y fundas. Además, en las imágenes se aprecia un incendio provocado en la playa para eliminar la basura acumulada, una práctica que agrava aún más el daño ambiental.
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“La situación es alarmante. No solo afecta la biodiversidad marina, sino que también pone en peligro el sustento de las comunidades locales que dependen de la pesca y el turismo”, expresó Carela al referirse a la gravedad del problema.
Diversos sectores han manifestado su preocupación, ya que la playa de Carenero es un punto estratégico para el desarrollo turístico de Samaná. La contaminación no solo perjudica la imagen del destino, sino que también compromete la salud pública y la preservación del medio ambiente.
En este sentido, se hace un llamado urgente a las autoridades municipales, al Ministerio de Medio Ambiente, al sector turístico y a la asociación de vendedores del Cayo Levantado para que adopten acciones coordinadas e inmediatas. Entre las medidas sugeridas se encuentran la limpieza de la playa, la implementación de programas de gestión de residuos y campañas de concienciación ambiental dirigidas tanto a la población local como a los visitantes.
“La protección de nuestros recursos naturales debe ser una prioridad. No podemos permitir que un paraíso como Carenero, que es orgullo de Samaná, continúe siendo devastado por la irresponsabilidad y la falta de control”, concluyó Carela.
La comunidad espera que las autoridades respondan de manera firme y efectiva para preservar este patrimonio natural, vital para la sostenibilidad de la región.